Biografía novelada de un propietario de cine de barrio y el ambiente que vivió en su época, con sus peripecias y anécdotas, en una sentida carta de amor al séptimo arte.
Es el primer anecdotario dedicado a los cines más humildes, aquellos a los que despectivamente se les llamaba “de pueblo”, y narra las situaciones, en ocasiones esperpénticas, que se dieron en sus salas. En vez de relatar sobre personalidades famosas, el libro describe al pueblo llano que abarrotó las salas rurales durante los 50’s, 60’s y 70’s, y a los pioneros que las regentaron bajo las más heterogéneas condiciones.